Los sueños no mueren con el cáncer

La empresaria, ex-modelo y novelista española Inés Sainz desfila cada día la valentía y fuerza que afrontó en su lucha contra el cáncer de mama.

1 de cada 8 mujeres tienen probabilidad de desarrollar cáncer de mama, por ello es tan importante prestar atención a nuestro cuerpo y acudir periódicamente a la cita ginecológica, ya que el tiempo de detección es crucial.
En Farmacia Boix sabemos que hay muchas dudas al respecto y queremos trasladarte la confianza necesaria para que las consultes con nosotros. Eso sí, nuestro consejo principal siempre será: acude a revisión.
Inés Sainz, aún sin tener antecedentes, acudió a una revisión ginecológica y fue cuando le notificaron que era una de esas 8 mujeres. Lo que no sabía el cáncer es que esta empresaria tenía fuerza y optimismo de sobra para vencerle.

– ¿Cambió tu vida tras la detección?

La verdad es que no. He trabajado mucho para tener la vida que siempre he querido tener y no estaba dispuesta a que ni un cáncer ni nadie se la llevara por delante.

Me gustan las cosas sencillas precisamente porque en mi trabajo estoy rodeada de lujo. Mi hijo, mi familia, mis amigos y mi trabajo son esenciales para mí. Solo recuerdo una cosa que cambió, dejé de ir a eventos. No podía soportar una alfombra roja más. Era tiempo perdido que dejaba de estar con la gente que quiero.


– Miedo. ¿En algún momento se apoderó de ti?

Sí. Absolutamente. Y es con diferencia lo peor. Como te decía, mi diagnóstico dentro de la gravedad fue muy leve, pero hablando con otras chicas que lo han sufrido de forma más agresiva, coincidíamos todas en que el miedo es lo peor. Se te congela el cerebro y no eres capaz de pensar. Es una emoción muy difícil de manejar, si no la más difícil.

Por desgracia ahora lo estamos viendo a nivel mundial con la covid_19. La gente está muerta de miedo y no lo sabe manejar. ¡A mí ya no me pilla de novata!


– ¿Qué te ha enseñado? y ¿cómo cambió tu visión tras el cáncer?

Me ha enseñado que era más valiente y más fuerte de lo que yo creía. Que el tiempo que tenemos de vida es un regalo que tenemos que aprovechar al máximo.

Si me volviera a pasar ya no tendría tanto miedo. El cáncer es una palabra que asusta mucho cuando la oyes por primera vez, pero hay un millón de tipos de cáncer y por tanto un millón de diagnósticos. Hay que mantener el ánimo alto y no dejarse vencer por el miedo.


– Lucha, superación y valentía. ¿Qué significan estás 3 palabras ahora para ti?

Bueno son tres palabras que los emprendedores las llevamos en la sangre. Estamos preparados para caer y levantarnos casi a diario porque muchos proyectos no salen por mucho esfuerzo que les hayas puesto. Hay cosas en la vida que sencillamente no dependen de ti. Mi madre me educó para ser una mujer que lucha por sus sueños, que supera los problemas aprendiendo de ellos y que en la vida hay que ser valiente.


– ¿Descubriste alguna parte de ti durante el proceso?

Mas allá de esa valentía y esa fortaleza extra, no. Me conozco muy bien. Me fui de casa muy jovencita y estoy muy acostumbrada a pasar mucho tiempo a solas conmigo. Es vital en la vida no engañarse a uno mismo y conocer tus puntos fuertes y tus puntos débiles para poder apoyarte en los primeros y mejorar los segundos.


– ¿Qué valor tiene para ti la concienciación desde una farmacia?

Las farmacias son fundamentales para concienciar. Seguramente sea el primer eslabón de la cadena. Muchas tenéis clientes de toda la vida y sé que os cuentan en confianza sus problemas de salud. Es importante que hagáis esa labor de recordarles que no deben saltarse nunca las revisiones porque es la única forma de pillarlo a tiempo y salvar la vida.


– Desde tu punto de vista, ¿qué crees que se podría hacer para una mejor concienciación de la enfermedad?

Es importante que la gente lo normalice. Efectivamente, los testimonios de gente más conocida pueden ayudar mucho a darle visibilidad. El cáncer no entiende de status social, ni de color de piel, ni de religión. Cuanto más se hable de ello mejor, porque le puede tocar a cualquiera en cualquier momento y con cualquier edad.


– ¿Qué es lo primero que se te pasó por la cabeza cuando te dijeron que habías vencido la enfermedad?

No te creas que lo doy por vencido del todo. Nunca puedes bajar la guardia con este tema. De momento gané una batalla, no la guerra. Siempre te queda ese miedo en el cuerpo por si se vuelve a reproducir. Pero intento que no me influya y sigo con mi vida con toda normalidad.